Incertidumbre, confianza y responsabilidad. Claves para contrarrestar la desinformación, la infodemia y la conspiranoia durante la pandemia de COVID-19

Se trata de un proyecto multidisciplinar que tiene como objetivo analizar las dinámicas de conocimiento entre ciencia, política y sociedad durante la pandemia de COVID-19. Combinando investigación biológica, metodología etnográfica y reflexión filosófica, se propone investigar los factores que puedan alterar estas dinámicas, como la desinformación, la polarización ideológica y la falta de una cultura deliberativa, centrándose tanto en sus implicaciones epistemológicas como éticas.

La pandemia ha desafiado nuestra arrogancia tecnológica, haciéndonos conscientes de nuestras vulnerabilidades y de nuestra interdependencia, y subrayando la importancia de la confianza y la responsabilidad. Las sociedades de la pandemia de COVID-19 están profundamente marcadas por unas incertidumbres, una desconfianza y unos miedos que afectan al comportamiento social. La infodemia, la desinformación y el discurso de la posverdad dificultan la implementación de medidas para contener el virus, y provocan, por su parte, un aumento de la conspiranoia, el negacionismo, los movimientos anticiencia y antivacunas, así como una polarización ideológica que desestabiliza la sociedad. Estos factores debilitan la cohesión social, alteran la gobernanza de la crisis pandémica y bloquean el diálogo necesario entre ciencia, política y sociedad, en un momento en el que precisamente la confianza en la ciencia y la política es crucial para la aceptación de medidas de control de la enfermedad que pueden restringir libertades fundamentales.

Los objetivos de nuestra investigación son los siguientes:

• Estudiar el impacto de la desinformación en los patrones de racionalidad y sentido común, identificando factores psicológicos, tecnológicos y cognitivos que contribuyen a su credibilidad.
• Identificar la lógica interna de movimientos anticiencia, antivacunas y negacionistas, así como los mecanismos que puedan servir para bloquear sus argumentos.
• Investigar sobre la imagen pública de la ciencia y los mecanismos por los que la ciudadanía obtiene información científica, determinando cuáles son las expectativas mutuas.
• Desarrollar estrategias para aumentar la confianza informada y rutinas para contrarrestar sesgos cognitivos.
• Contribuir a la construcción de una ética de la responsabilidad para las sociedades digitales, con una triple dimensión: moral, política y epistémica.